El caso de Lorena es especialmente escandaloso. Ha perdido su vivienda, pero la última palabra no está dicha, porque es algo tan injusto que no lo vamos a tolerar.
En 2006 firmó una hipoteca con Kutxa para poder adquirir la vivienda de protección oficial que le fue adjudicada en Errenteria. La hipoteca fue referenciada a IRPH Cajas.
En 2010 su situación económica empeora y empieza a tener problemas para afrontar el pago de las cuotas calculadas con un IRPH Cajas que para entonces ya había sido afeado por Europa.
En 2011 Kutxa le comunica que adeuda 2.900 euros, y amenaza con poner en marcha su equipo jurídico, con lo cual la deuda subiría a 14.000 euros debido a las costas del mismo. Transcurrida una semana, Kutxa le reclama ya 14.000 euros y amenaza ahora con aplicar una cláusula según la cual podría reclamarle la totalidad del préstamo.
Lorena acude al Servicio de Mediación Hipotecaria del Gobierno Vasco, donde le explican que para poder mediar necesita que Kutxa le expida un “certificado de fin de negociación”. Kutxa le confirma que dan por finalizadas las negociaciones, pero se niega a expedirle el certificado porque considera también que no hay lugar para mediaciones. Así que no hay mediación, porque el Gobierno Vasco no quiere mediar si a Kutxa no le apetece (!!)
Así que Lorena se ve indefensa y Kutxa sigue engordando la deuda, en base a un índice IRPH Cajas en continua subida (aunque ya había sido publicada la Orden Ministerial que ordenaba su desaparición por manipulable), unos intereses de demora desorbitados (declarados ahora abusivos) y unas comisiones de reclamación de posiciones deudoras igualmente desproporcionadas (e igualmente declaradas abusivas)
En 2012 la vivienda de Lorena es subastada. La subasta resulta desierta por falta de licitadores, el Gobierno Vasco no ejerce su derecho de adquisición preferente (por tratarse de una Vivienda de Protección Oficial), y Kutxa se convierte en titular de una VPO (!!)
El mismo 2012, un abogado que entonces trabajaba en el citado Servicio de Mediación Hipotecaria del Gobierno Vasco conoce el caso de Lorena y le parece tan injusto que decide ayudarle. Su nombre es J. Lorena confía en J, que se muestra indignado con la actitud de Kutxa. Esta plataforma ha tenido acceso a correos electrónicos remitidos por J a Lorena y de los que extraemos las siguientes frases textuales:
El comportamiento de Kutxa es indecente. Te mando todo mi ánimo. Es muy triste e injusto que estéis viviendo todo esto. Nos asiste la ley y la moral, y no vamos a cejar en nuestro empeño hasta que se consiga un acuerdo. Estoy seguro que este calvario que estás viviendo va a acabar pronto. No vamos a descansar hasta que se consiga una resolución justa.
En 2013, al entrar en vigor de la Ley 1/2013 de medidas para reforzar la protección a los deudores hipotecarios, abogados de Stop Desahucios observan que el caso de Lorena puede pelearse en base a dicha ley y plantean el denominado Incidente Extraordinario de Oposición por Cláusulas Abusivas.
Pues bien, ¿qué abogado creéis que designa Kutxa para luchar contra los intereses de Lorena en este Incidente Extraordinario de Oposición por Cláusulas Abusivas? Pues nada más y nada menos que J, que trabaja ahora para Kutxa y ha olvidado lo “indecente” del caso. Así es, Kutxa ficha a un abogado que ha trabajado en el Servicio de Mediación Hipotecaria, depositario de las confidencias de decenas de familias víctimas de hipotecas Kutxa. Y no duda en asignarle el caso de Lorena. Y J se enfrenta ahora a Lorena para evitar que pueda recuperar su vivienda, cuando no hace mucho decía “Espero de todo corazón que se haga justicia y busquemos el modo por el que podáis mantener la vivienda”. Sin comentarios.
Pero con la ayuda de Stop Desahucios vamos a dar la vuelta a esto y vamos a evitar que Lorena se vea en la calle.
En diciembre de 2013 un juzgado donostiarra dicta auto sobre el Incidente Extraordinario presentado por la defensa de Lorena y entre otras cosas declara nulos por abusivos los intereses de demora y la comisión de notificación de posiciones deudoras que ha aplicado Kutxa. La pregunta es qué hubiera ocurrido si todo el dinero que Lorena dedicó a hacer frente a estos intereses ahora anulados lo hubiera podido dedicar al pago de su deuda de 2.900 euros. Y la respuesta es que probablemente no hubiera existido deuda.
Además, la defensa de Lorena entiende que la aplicación del IRPH Cajas es igualmente abusiva, por lo que presentará una demanda contra Kutxa pidiendo la nulidad de la cláusula correspondiente.
El equipo jurídico de Stop Desahucios pondrá todos los medios para conseguir poner fin a este abuso, y nosotros señalaremos a los culpables para que la ciudadanía sepa quién es quién en esto que algunos llaman crisis pero no es otra cosa que una gran estafa que no estamos dispuestos a pagar.